La casa fantasma de Sarmiento
Reportaje De las promesas al olvido Paula Díaz / diario de leon.
Cuatro años después del acuerdo entre Junta y Xunta para levantar un centro sociocultural con el nombre del ilustre escritor villafranquino el proyecto permanece como un solar vacío

El 18 de mayo de 2002 los presidentes de la Junta de Castilla y León y de la Xunta de Galicia, Juan Vicente Herrera y Manuel Fraga firmaban en Villafranca un convenio en virtud del cual ambas administraciones se comprometían a edificar, en el solar en el que un día se levantó la casa natal de Pedro José García Balboa, más conocido como Fray Martín Sarmiento, un centro cultural desde el que difundir su memoria y promocionar el Camino. Cerca de cuatro años después el compromiso ha caído en el cajón del olvido y este centro sociocultural, que según las previsiones anunciadas en aquel momento debería llevar ya dos años funcionando, sigue siendo un espacio vacío, un solar en medio de la monumental calle del Agua. «Es una vergüenza pasar por la calle del Agua y ver ahí ese vacío, casi insultando», señala el alcalde de Villafranca, Vicente Cela, a la vez que se pregunta a qué espera la Junta para cumplir su compromiso. «Nosotros no podemos hacer más que seguir insistiendo. Hemos estado llamando constantemente a las puertas de la Junta para que nos escuchen, pero parece que se han olvidado de que tienen un convenio que cumplir, firmado por Herrera», subraya Cela, quien, no obstante, no pone en duda la buena disposición de la Xunta para sacar adelante el proyecto a pesar el cambio de gobierno. El convenio que rubricaron Castilla y León y Galicia en el 2002, año en el que se dedicaron las Letras Gallegas al ilustrado nacido en Villafranca el 9 de marzo de 1965, contemplaba la edificación, en el solar donde se ubicó su casa natal, de un centro cultural dedicado a su figura. El acuerdo establecía que la financiación del proyecto, presupuestado en 480.809 euros, debería ser asumida a partes iguales por ambas administraciones, mientras que el Ayuntamiento se haría cargo de su gestión y mantenimiento. Este proyecto fue entregado por el arquitecto redactor a finales de ese año, aunque unas diferentes existentes entre ambas autonomías por el diseño del edificio, que fueron subsanadas meses después, retrasaron su aprobación final. Un visto bueno que no ha llevado aparejado el inicio de las obras. En este sentido, el regidor villafranquino confiesa que le cuesta entender porqué la Junta mantiene paralizado el proyecto, a pesar de que, según recuerda, tanto Fraga como Herrera, reiteraron su buena disposición al respecto durante la celebración en Santiago de los actos en honor al Apóstol el pasado Año Jacobeo y a pesar de que, en octubre de 2003, la consejera de Cultura anunciara la habilitación de una partida con la que el Gobierno Regional pretendía asumir su parte. «Donde está el dinero, por qué se retiene», se pregunta Cela, quien considera que lo que está ocurriendo «no tiene lógica, es como estrellarse contra una pared que no escucha». Así, pide la Junta que, tanto en éste como en otros proyectos, «deje de sopesar los colores políticos y mire el daño que le está haciendo a una población como Villafranca».